Dan Andersson, poeta de su terruño

Hebert Abimorad

Contenido de la edición 10.04.2023

 

Daniel "Dan" Andersson, escritor y poeta sueco, nació 6 de abril de 1888 en el actual municipio de Ludvika, Dalarna, y falleció, de manera trágica, el 16 de setiembre de 1920 en Estocolmo.

Andersson se cuenta entre los autores del movimiento proletario, que se destacó en la década del 30; fue un activo socialdemócrata. A veces escribía bajo el seudónimo de Black Jim, especialmente en el periódico Ny Tid, Gotemburgo.

En 1902, a la edad de 14 años, tomó el tren a Gotemburgo para luego embarcarse a Nueva York y finalmente llegar a Minnesota, a la granja de la tía Sara y Carl Petter Andersson, donde vivió y trabajó en su agricultura. 

La idea fue cerciorarse si era conveniente seguir los pasos de su familia. No convencido, escribió en una carta a Suecia diciendo que no había mejores condiciones para la familia en los Estados Unidos que en casa, a lo que el padre respondió que regresara, cosa que realizó.

En 1918 retornó a Gräsberg, una de sus residencias, para casarse el 19 de junio de 1918 con su prometida, Olga Turesson.

Varios de los cuentos y poemas de Andersson tienen una fuerte conexión con la granja, en el municipio de Ludvika, lugar donde vivió muchos años. Entre ellos, La última noche en Paindalen (1915) y La canción de cuna de Kestina (1917).

A partir de este momento se involucró activamente como escritor; escribió poemas y canciones sobre, entre otras cosas, su pueblo natal, que casi un siglo después todavía se leen y cantan en las casas de campo suecas. Sus principales intérpretes incluyen a Gunde Johansson y Thorstein Bergman, pero también él mismo puso música a algunos de sus poemas, siendo quizás los más famosos A mi hermana y Jungman Jansson.

El compositor y profesor Gustaf Nordqvist musicalizó dos de los poemas de Dan Andersson. Uno de ellos es Pero escuché una canción, en un movimiento para solista y coro, grabado en disco con el cantante eclesiástico Einar Ekberg. Incluso la partitura de Nordqvist para Es algo más allá de las montañas está cantada en el disco, entre otros, por Einar Ekberg y Göran Stenlund.

Dan Andersson dominó el acordeón y el violín. Fue empleado de Ny Tid en Gotemburgo entre 1917 y 1918 y también traductor al sueco de textos escritos por Rudyard Kipling y Charles Baudelaire.

 

Muerte

 

El busto de Dan Andersson está erigido en la Plaza de hierro de la ciudad de Gotemburgo, frente al periódico socialdemócrata Arbetet, al cual dedicó su vida.

Murió en el Hotel Hellman de Estocolmo el 16 de setiembre de 1920, donde había ido a buscar trabajo en el periódico de su partido. El personal del hotel había usado cianuro de hidrógeno contra las chinches y no había limpiado la habitación según lo prescrito. A las 3 p. m.  Andersson fue encontrado muerto. Al mismo tiempo, también murió el inspector de seguros Elliott Eriksson, de Bollnäs. El hotel estaba ubicado en Bryggaregatan 5 en Estocolmo, pero fue demolido en la década de 1960.

En el centenario de la muerte de Dan Andersson se inauguró una placa conmemorativa en el sitio donde se encontraba el Hotell Hellman.

Dan Andersson está enterrado en el cementerio de la ciudad de Ludvika

 

La última canción

Apaga tus estrellas

tu alta noche primigenia,

y oscuro, joven brezo

bajo abetos grises.

Buenas noches mi vida errante,

calla mi risa loca,

y vuela lentamente,

los cisnes negros de mi juventud.

 

Buenas noches, hogar allá arriba,

¡Adiós, mi patria de la infancia!

Tu oscuridad se vuelve roja;

como la sangre se convierte en la luz de la mañana.

Mi alma está enferma y vacía,

mi alma es mala y doliente,

ahora déjame dormir profundamente

sobre la grava cubierta de rocío.

 

Larga fue la tarde de mi añoranza,

mi alma era fuego eterno,

que ardía como árboles muertos,

en junio de vientos cálidos.

Canta, bosque, tu genial canción

hasta que el soñador esté muerto

alrededor de su cama dura.

¡Que en la tormenta de la mañana suene la alarma!

 

HEBERT ABIMORAD

Escritor uruguayo residente en Suecia

 

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2023-04-10T13:22:00